Rusia ha criticado al gobierno de Estados Unidos por intimidar a Venezuela y alentar a la oposición venezolana a dar un golpe de estado contra el presidente Nicolás Maduro, quien asumió su segundo mandato la semana pasada.
“Las naciones deben evitar entrometerse en los asuntos internos de otras naciones”, dijo el miércoles el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov. Lavrov dijo que el soporte de Estados Unidos a las fuerzas de la oposición en Venezuela “los ha hecho reacios a buscar la reconciliación (con el presidente), lo cual es lamentable”.
Venezuela se encuentra actualmente en una crisis política, con la Asamblea Nacional controlada por la oposición declarando al presidente Maduro un “usurpador” y a su lider, Juan Guaido, el “presidente interino” del país. La medida se produjo después de un fuerte apoyo público de Estados Unidos, que ha estado abogando por derrocar a Maduro durante bastante tiempo.
Estados Unidos ha atacado al gobierno de Maduro con una serie de sanciones económicas y personales, y según los informes, el gobierno estadounidense ha considerado una intervención militar en Venezuela.
El mandato de la Asamblea Nacional para representar a los venezolanos sigue siendo cuestionado. En 2017, el país reformó su sistema parlamentario mediante la introducción de un nuevo organismo legislativo llamado la Asamblea Constitucional, que está controlada por políticos pro gubernamentales. La oposición y sus partidarios en Estados Unidos rechazaron y llamaron a la reforma como una toma de poder y declararon ilegal la nueva legislatura.
Al explicar la posición de Rusia sobre el conflicto, Lavrov dijo que la intromisión de Estados Unidos en Venezuela era “muy alarmante e indicó que la política de Estados Unidos de desestabilizar a los gobiernos que no le gustan (siguen sus ordenes) sigue siendo una prioridad para Estados Unidos”.
Venezuela ha sufrido años de dificultades económicas y sociales, que la oposición atribuye al mal gobierno de Maduro. El presidente Maduro culpa de las dificultades al sabotaje de grandes empresas e intereses extranjeros, que quieren que su gobierno socialista sea expulsado del poder.
Fuente: RT