Los compradores y vendedores de contenido sexual con menores de edad han desarrollado una red próspera gracias a los algoritmos de descubrimiento en Instagram, la plataforma para compartir fotos propiedad del gigante de Silicon Valley Meta, informó el Miércoles el Wall Street Journal.
“Instagram conecta a los pedófilos y los guía a los vendedores de contenido a través de sistemas de recomendación que sobresalen en la vinculación de aquellos que comparten intereses de nicho”, informó el Journal, basado en investigaciones realizadas conjuntamente con la Stanford University y la University of Massachusetts Amherst.
Las cuentas sexualizadas en la plataforma son “descaradas” sobre sus intereses, pero no publican materiales ilegales abiertamente, sino que eligen ofrecer “menús” de contenido, según los investigadores. También usan ciertos emojis como identificación, en el que un mapa significa “persona atraída por menores”, un eufemismo para pedófilo, y pizza de queso es la abreviatura de “pornografía infantil”, dijo Brian Levine, director del UMass Rescue Lab at Amherst. Muchos usuarios se describen a sí mismos como “amantes de las pequeñas cosas de la vida”, el dijo.
Incluso un contacto pasajero con una cuenta de pedófilo puede activar el algoritmo de Instagram para comenzar a recomendarla a otros usuarios. Un ejemplo citado por el WSJ involucra a Sarah Adams, una madre canadiense que combate la explotación infantil. En Febrero, uno de sus seguidores le envió un mensaje con una cuenta que promocionaba “niños pequeños incestuosos”, y Adams vio su perfil brevemente para denunciarlo como inapropiado. Durante los días siguientes, dijo Adams, recibió mensajes de padres horrorizados que visitaron su perfil solo para recibir recomendaciones para ver el perfil del pedófilo.
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“El problema de Instagram se reduce a las características de descubrimiento de contenido, las formas en que se recomiendan los temas y cuánto se basa la plataforma en la búsqueda y los enlaces entre cuentas”, dijo David Thiel, tecnólogo jefe del Observatorio de Internet de Stanford que anteriormente trabajó en Meta, al Journal.
Los investigadores dijeron que la plataforma también permite búsquedas que Meta reconoce que son ilegales. Los usuarios reciben una ventana emergente que les notifica que el contenido puede incluir “abuso sexual infantil” y les ofrece dos opciones: “Obtener recursos” y “Ver resultados de todos modos”.
El National Center for Missing & Exploited Children, una organización sin fines de lucro que trabaja con la policía de los Estados Unidos, recibió 31.9 millones de informes de pornografía infantil en 2022. Las plataformas de propiedad de Meta representaron el 85% de los informes, y unos cinco millones provinieron solo de Instagram.
Los investigadores de Stanford también encontraron algunas cuentas de sexo infantil en Twitter, pero menos de un tercio de las que encontraron en Instagram, que tiene una base de usuarios mucho mayor estimada en 1,300 millones. Twitter tampoco recomendó tanto esas cuentas y las eliminó mucho más rápido.
“La explotación infantil es un crimen horrible”, dijo un portavoz de Meta al Journal cuando se contactó a la compañía sobre los hallazgos. La compañía de Mark Zuckerberg reconoció que ha tenido “problemas dentro de sus operaciones de aplicación de la ley” y dijo que había establecido un grupo de trabajo interno para abordar la situación.
Meta intenta activamente eliminar la pornografía infantil, prohibiendo 490,000 cuentas solo en Enero y eliminando 27 redes de pedófilos en los últimos dos años. La compañía también dijo que había tomado medidas enérgicas contra los hashtags sexualizados y ajustado su sistema de recomendaciones desde que recibió la consulta del WSJ.
Fuente: RT