Twitter está en llamas por el debate sobre la decision casi simultánea de Facebook, Apple, YouTube y Spotify para tomar medidas contra el controvertido presentador de YouTube Alex Jones y su canal InfoWars citando “discurso de odio”.
El InfoWars Editor-at-large, Paul Joseph Watson, tuiteó el lunes que Facebook había “prohibido permanentemente” la página de noticias por discursos de odio “no especificados” y describió la decision como un “precedente escalofriante contra la libertad de expresión”.
Facebook confirmó la prohibición en una publicación de blog, diciendo que las cuatro páginas de InfoWars fueron bloqueadas debido a “repetidas violaciones de los estándares de la comunidad y la acumulación de demasiados ataques”. En un comunicado, Apple dijo que “no tolera el discurso de odio” y dijo que cree en “representar una amplia gama de puntos de vista” siempre y cuando las personas sean “respetuosas” con las opiniones divergentes.
YouTube rápidamente hizo lo mismo con una declaración que decía que la cuenta de Jones había sido “cancelada por infringir los Lineamientos de la comunidad de YouTube”. Spotify dijo que había eliminado todos los episodios de podcast de Jones debido al “contenido de odio”.
Twitter ha sido inundado con reacciones a esta prohibicion. Algunas personas estaban encantadas de ver prohibida la controvertida presentadora y expresaron su decepción por el hecho de que Twitter aún no haya prohibido InfoWars.
Otros se mostraron menos satisfechos con la decisión y dijeron que no era más que la censura de las voces conservadoras y de derecha, y un usuario sugirió que se trataba de un “apartheid en línea”.
Algunos también notaron la curiosa manera en que Facebook, Apple, YouTube y Spotify decidieron prohibir a Jones exactamente al mismo tiempo, a pesar de que había estado activo en sus plataformas durante años. El ex líder del UK Independence Party, Nigel Farage, tuiteó que Jones era “la víctima hoy de la colusión de los grandes gigantes tecnológicos con el poder”.
La Constitución de los Estados Unidos prohíbe explícitamente la censura gubernamental. Así que los gigantes tecnologícos de Silicon Valley: Facebook, Apple, YouTube y Spotify se convirtieron en los guardianes del “buen pensamiento”, prohibiendo en sus plataformas a cualquiera que se encuentre en conflicto con sus ‘estándares comunitarios’ arbitrarios.
El director de campaña del presidente estadounidense Donald Trump 2020, Brad Parscale, incluso intervino en el debate, pareciendo respaldar una sugerencia de que Facebook debería tener “una base de datos transparente que muestre cuentas prohibidas” que explique exactamente por qué una cuenta viola sus reglas.
Fuente: RT