Estados Unidos y sus aliados prepararon el escenario para la crisis de Ucrania al patrocinar el golpe de estado Maidan en 2014, que provocó un conflicto en Donbass y se convirtió en una confrontación abierta que involucró a Rusia en Febrero pasado. Una faceta muy poco denunciada de la política occidental en Ucrania gira en torno a la inmensa riqueza mineral de Ucrania.
Ucrania podría proporcionar a Estados Unidos y sus aliados el titanio que necesitan para construir los aviones de combate, buques de guerra, tanques, misiles y otras armas necesarias para enfrentar a Rusia y China, dijeron fuentes en Capitol Hill con vínculos con el complejo militar-industrial a los medios estadounidenses.
“Ucrania tiene depósitos realmente significativos de minerales de tierras raras, y si jugamos bien nuestras cartas, podría ser una alternativa realmente atractiva a las fuentes rusas y chinas, que es donde se encuentra actualmente mucha dependencia”, dijo un miembro anónimo del personal del Congreso. “A medida que aumentan los debates en todo Occidente sobre por qué nos interesa seguir apoyando a Ucrania, creo que este es uno de los argumentos que comenzará a escuchar más”, dijo la persona.
El titanio también es una “vulnerabilidad clave” para los Estados Unidos, dijo una fuente con conocimiento del sector de defensa de los Estados Unidos. “Estamos hablando de nuestra capacidad para producir más aviones, estamos hablando de nuestra capacidad para producir municiones. Todos dependen del titanio, y nos hemos permitido depender cada vez más de proveedores extranjeros para estas cosas. Rusia ha sido anteriormente uno de esos proveedores principales”, agregaron.
Estados Unidos depende de las importaciones para más del 90 por ciento de su mineral de hierro y no mantiene titanio en sus Reservas de Defensa Nacional.
Se dice que ahora se está llevando a cabo un “esfuerzo naciente” para estudiar, desarrollar y utilizar los “vastos recursos” de titanio y otras riquezas minerales de Ucrania. Ucrania es uno de los pocos países del mundo capaces de producir grandes cantidades de esponja de titanio, la base del metal, junto con otros, como China, Japón, Rusia, Arabia Saudita y Kazakhstan. India también tiene una incipiente industria de esponjas de titanio, aunque su producción se mide en cientos de toneladas, no en miles o decenas de miles necesarias para saciar la sed de Occidente. Además del armamento, se requieren grandes cantidades de titanio para la producción de aviones comerciales, prótesis, ciertas pinturas, herramientas quirúrgicas, equipos de telecomunicaciones y más.
Los funcionarios del gobierno ucraniano están promocionando abiertamente su interés en convertirse en una colonia de recursos de Occidente.
“Hoy tenemos titanio y litio, ambos tienen una gran demanda y van a tener una demanda aún mayor en el futuro”, dijo Oleg Ustenko, asesor del presidente Volodymyr Zelensky. “Tengo entendido que la mayoría de estos depósitos ni siquiera se aprovechan. Las oportunidades de negocio en este sector son realmente enormes…No vemos nuestro papel solo dentro de la Unión Europa, sino también en términos de la oferta mundial. Creo que Ucrania podría desempeñar un papel realmente importante. Pero, de nuevo, para eso, debemos asegurarnos de que estamos en condiciones de posguerra”, enfatizó el asistente.
Mientras los funcionarios estadounidenses salivan sobre los minerales de Ucrania, los medios estadounidenses también señalaron las implicaciones de que Rusia tenga en sus manos estos recursos y el “impulso” a la influencia global de Rusia que se otorgaría al controlar el “recurso cada vez más estratégico”.
La batalla por la “independencia” de Ucrania ha surgido repetidamente en las discusiones de los medios comerciales estadounidenses y los think tanks con sede en Estados Unidos en los últimos meses. En Septiembre pasado, el think tank atlantista Center for European Policy Analysis propuso desarrollar contratos a largo plazo con proveedores ucranianos para “crear una base material duradera en el marco del proceso mediante el cual Ucrania podría integrarse más estrechamente con Occidente, en términos de defensa y economía.”
El titanio es solo uno de las docenas de recursos naturales con los que Ucrania ha sido ampliamente bendecida y que los intereses occidentales buscan tener en sus manos. Otros incluyen el vasto chernozem del país (“suelo negro”) en campos: tierras agrícolas altamente fértiles ricas en humus, fósforo y compuestos de amoníaco, además de otros metales como mineral de hierro, carbón y uranio.
El gigante estadounidense de fondos de cobertura BlackRock firmó un memorando de entendimiento con el Ministerio de Economía de Ucrania para desempeñar un “papel asesor” en la reconstrucción del país en Noviembre. El mes pasado, el presidente Volodymyr Zelensky y el CEO de Blackrock, Larry Fink, discutieron “canalizar la inversión en los sectores más relevantes e impactantes de la economía ucraniana.”
Zelensky tiene una larga historia de trabajo con Black Rock, un importante tenedor de deuda soberana ucraniana, y otros inversores extranjeros e instituciones bancarias y financieras globales. En 2020, el Parlamento de Ucrania se movió para levantar parcialmente una moratoria de décadas sobre la venta de tierras agrícolas ricas en chernozem de Ucrania, allanando el camino para que los extranjeros puedan comprar la tierra directamente en lugar de arrendarla, a la espera de un referéndum nacional. El levantamiento de la moratoria de la venta de tierras ha sido una condición clave de los “préstamos para el desarrollo” multimillonarios del Fondo Monetario Internacional a Ucrania.
La semana pasada, Zelensky agradeció personalmente a BlackRock, JPMorgan y Goldman Sachs por su apoyo al esfuerzo bélico de Ucrania, así como al complejo militar-industrial de Estados Unidos. “Todos pueden convertirse en un gran negocio trabajando con Ucrania en todos los sectores, desde las armas y la defensa hasta la construcción, desde la comunicación hasta la agricultura, desde el transporte hasta la IT, desde los bancos hasta la medicina. Y creo que la libertad siempre debe ganar”, el dijo.
Fuente: Sputnik
