El ejército ruso ha dicho que utilizó sus misiles hipersónicos Kinzhal de última generación para destruir un depósito de armas cerca de la ciudad de Ivano-Frankivsk en el oeste de Ucrania.
El ataque con el sistema de misiles lanzados desde el aire tuvo lugar el Viernes, dijo el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Igor Konashenkov, durante una sesión informativa.
El misil hipersónico apuntó a “un gran depósito subterráneo de misiles y municiones aéreas de las fuerzas ucranianas” en la aldea de Deliatyn, el agregó.
Kinzhal, que significa “dagger” en inglés, fue utilizado por los militares rusos por primera vez desde el inicio del conflicto ucraniano el 24 de Febrero.
Se dice que esos misiles pueden penetrar cualquier defensa aérea existente viajando a una velocidad impactante de hasta Mach 10 y maniobrando constantemente durante su vuelo.
Los misiles Kinzhal son transportados por aviones interceptores supersónicos MiG-31K, que NATO llama “Foxhound”.
El Kinzhal es uno de los varios sistemas hipersónicos fabricados para el ejército del país en los últimos años, junto con el planeador Avangard, que se instala en misiles balísticos intercontinentales basados en silos, y misiles Zircon (Tsirkon), desarrollados para la marina rusa.
Rusia envió sus tropas a Ucrania el mes pasado después de un enfrentamiento de siete años por el fracaso de Ucrania en la implementación de los términos de los acuerdos de Minsk, y el eventual reconocimiento por parte de Rusia de las repúblicas escindidas del Donbass de Donetsk y Lugansk. Los protocolos negociados por Alemania y Francia tenían por objeto regularizar el estatuto de esas regiones dentro del Estado de Ucrania.
Rusia ahora ha exigido que Ucrania se declare oficialmente un país neutral que nunca se unirá al bloque militar NATO liderado por Estados Unidos. Ucrania insiste en que la ofensiva rusa fue completamente no provocada y ha negado las afirmaciones de que planeaba retomar las dos repúblicas por la fuerza.
Fuente: RT