El Ministerio de Defensa de Rusia ha publicado las primeras bajas militares oficiales resultantes de la operación especial en Ucrania, diciendo que 498 soldados rusos murieron en cumplimiento del deber.
Otros 1,597 militares rusos han sufrido lesiones de diverso grado durante la operación, agregó el ministerio.
El ministerio de Defensa destacó que los informes de “innumerables” pérdidas entre los militares rusos son falsos y difundidos deliberadamente por los medios de comunicación. El portavoz del Ministerio de Defensa, Igor Konashenkov, dijo que los informes de que Rusia había utilizado reclutas y cadetes de las instituciones militares en la operación también son falsos.
Avance de la Operación Especial
El portavoz también compartió la información más reciente sobre las bajas entre los soldados ucranianos y los batallones nacionalistas: unos 2,870 han muerto y 3,700 han resultado heridos. El Ministerio de Defensa de Rusia y el presidente Vladimir Putin se dirigieron repetidamente a los militares ucranianos pidiéndoles que ignoraran las órdenes criminales de las autoridades nacionalistas.
Konashenkov agregó que los batallones nacionalistas están preparando “provocaciones” y están utilizando a las poblaciones civiles de las ciudades ucranianas como escudos humanos.
El Ministerio de Defensa ruso también informó sobre el progreso de la operación especial, diciendo que las fuerzas rusas han tomado el control de las ciudades de Krasny Liman, Torskoye, Kremnenaya, Varvarovka y Borovenki. El ministerio también dijo que se había creado un corredor humanitario al suroeste de Kharkov.
Aviación rusa logra superioridad aérea sobre toda Ucrania
Konashenkov agregó que las fuerzas de la República Popular de Donetsk (DPR) han rodeado la ciudad de Mariupol, controlada por las fuerzas de Ucrania. Mariupol se encuentra en la costa norte del mar de Azov.
El portavoz del Ministerio de Defensa señaló que el ejército ruso está llevando a cabo una operación para desactivar la amenaza de que Ucrania obtenga armas nucleares y tenga bases militares de NATO instaladas en su territorio.
Antes del inicio de la operación, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky amenazó repetidamente con retirarse del Acuerdo de Budapest en virtud del cual la recién creada Ucrania renunció al arsenal nuclear que heredó de la URSS a cambio de garantías de seguridad. Zelensky afirma que se violaron esas garantías. El presidente Vladimir Putin, a su vez, señaló que Ucrania no tardaría mucho tiempo en recrear las tecnologías para crear armas nucleares y advirtió que Rusia ve este potencial como un riesgo existencial para sí misma.
Fuente: Sputnik