El veterano presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, ha dicho que nunca renunciará a su cargo si Occidente no pone fin a los esfuerzos para expulsarlo del principal puesto del país, afirmando que está preparado para desplegar no solo armas nucleares, sino también “supernucleares” para disuadir a sus enemigos.
En declaraciones a periodistas el Jueves, Lukashenko acusó a Occidente de “atacarlo” e intentar organizar golpes de estado en Bielorrusia.
Sobre el tema de una posible transferencia de poder en el país, el presidente, que ha estado en el cargo desde 1994, dijo: “si el Occidente colectivo retira la vista de Bielorrusia y no intenta revertir las cosas allí, como sucedió en 2020, entonces todo será legal y completo, todo sucederá antes de lo que quieren. Si nos atacan, como en 2020, entonces seré un presidente eterno.”
El hombre fuerte también afirmó que Bielorrusia estaba preparada para desplegar armas nucleares, así como armas aún más poderosas, no especificadas, para defenderse de las amenazas de Occidente. “En caso de emergencia, si nuestros enemigos y oponentes toman medidas tan absurdas y estúpidas, desplegaremos no solo armas nucleares, sino incluso posibles supernucleares, para defender nuestro territorio”, el dijo.
El líder bielorruso tampoco descartó la posibilidad de reconocer la independencia de la República Popular de Donetsk y la República Popular de Lugansk, autoproclamados estados escindidos en la región oriental de Donbass de Ucrania, que han estado atrapados en un conflicto con las fuerzas de Ucrania desde 2014. La decisión se tomaría junto con Rusia, enfatizó, explicando: “acordaremos con el Presidente ruso Vladimir Putin cómo actuar en el mejor interés de Rusia y Bielorrusia, pero será una decisión mutua.”
En 2020, estallaron protestas callejeras masivas en Bielorrusia después de unas disputadas elecciones presidenciales en las que Lukashenko obtuvo la victoria con más del 80% de los votos. Figuras de la oposición, así como muchos observadores extranjeros, afirmaron que los resultados estaban amañados a su favor, y su oponente principal en la carrera, Svetlana Tikhanovskaya, se vio obligado a abandonar el país o se enfrentaría al arresto.
Lukashenko ha sido acusado de imponer una dura represión policial contra la oposición política y los medios de comunicación después de las elecciones, lo que provocó que muchas figuras y activistas antigubernamentales huyeran de Bielorrusia y cerró prácticamente todos los medios de comunicación de la oposición.
Fuente: RT