La aplicación del mandato de vacuna Covid-19 del presidente Joe Biden para los grandes empleadores ha sido suspendida, 11 días después de que un tribunal de apelaciones de Estados Unidos congelara la orden por “graves cuestiones estatutarias y constitucionales.”
La Occupational Safety and Health Administration (OSHA) ha publicado un aviso en su sitio web, diciendo que la agencia suspendió la implementación y el cumplimiento del mandato de vacunación para empleadores con 100 o más trabajadores. La OSHA argumentó que “sigue confiando en su autoridad para proteger a los trabajadores en emergencias”, pero señaló que el US Court of Appeals for the Fifth Circuit ordenó a la administración estadounidense detener la aplicación del mandato de Biden hasta que se dicte una nueva sentencia.
La administración había dado un tono desafiante a la decisión judicial del 6 de Noviembre, con la portavoz de la White House, Karine Jean-Pierre, diciéndole a los periodistas dos días después que las empresas deberían continuar avanzando obligando a sus empleadores a ser inoculados o someterse a pruebas semanales.
El mismo tribunal confirmó su congelación del mandato el 12 de Noviembre, condenando la política como “asombrosamente excesiva” y “fatalmente defectuosa”. El emergency temporary standard (ETS) que la OSHA empleó para implementar el mandato se usa solo raramente para evitar abusos de “poder extraordinario”, dijo el juez Kurt Engelhardt, señalando que la herramienta había sobrevivido al escrutinio legal solo una vez desde que la OSHA se fundó en 1971.
La OSHA emitió la ETS para la vacuna el 5 de Noviembre, dando a los empleadores 30 días para ordenar que sus trabajadores se vacunen y 60 días para lograr el cumplimiento de los empleados. Los trabajadores también tuvieron la opción de someterse a pruebas Covid semanales. Se han presentado docenas de demandas sobre la orden, y esas demandas se consolidaron el Martes ante la Court of Appeals for the Sixth Circuit federal, con sede en Cincinnati.
El Sixth Circuit decidirá si bloquear permanentemente el mandato, y la parte perdedora probablemente apelará su caso ante la Corte Suprema de Estados Unidos. Once de los 16 jueces del tribunal con sede en Cincinnati fueron nombrados por los presidentes republicanos Donald Trump y George W. Bush. Los otros cinco fueron nombrados por los presidentes demócratas Barack Obama y Bill Clinton.
Fuente: RT
