La minera canadiense Alamos Gold anunció su intención de construir una mina de oro cerca de “su yacimiento” de oro, ubicado en el municipio de Sahuaripa, del estado mexicano de Sonora.
Despues de un estudio económico interno realizado por Minas de Oro Nacional, subsidiaria de Alamos Gold en México, se procederá a la construcción dela mina La Yaqui Grande a partir de la segunda mitad de 2022.
Alamos Gold estima una inversión inicial de 137 millones de dólares para iniciar la construcción de la mina, recursos que espera se “paguen” con las ventas del oro mexicano extraído de Mulatos.
Saqueo descarado: Presidente de México acusa a mineras canadienses de negarse a pagar impuestos
El presidente y director ejecutivo de Alamos Gold, John McCluskey, indicó que La Yaqui Grande representa la próximo mina de bajo costo y alto rendimiento de la compañía canadiense en Sonora.
“Dada su mayor escala y perfil de bajo costo, se espera que La Yaqui Grande impulse un fuerte crecimiento del flujo de efectivo del Distrito de Mulatos en 2022 y más allá”, McCluskey explicó.
Al respecto, la empresa canadiense pronosticó que la producción promedio de oro en Mulatos durante los siguientes cinco años será de 123,000 onzas anuales, con costos de mantenimiento totales de 578 dólares por cada onza.
La fase inicial de construcción de la nueva mina se desarrollará en los próximos 2 años con una plataforma de lixiviación en pilas independientes y un tren de trituración adyacente a la producción de La Yaqui Fase I, ubicada a 7 kilómetros de la mina Mulatos.
La Yaqui Grande recibió todos los permisos necesarios, incluida la evaluación final de impacto ambiental y una autorización de cambio de uso del suelo por parte de las autoridades mexicanas desde 2019.
Los precios actuales del oro (1,955 dólares por onza) han inyectado nuevos flujos de efectivo, lo cual también ha impulsado un aumento en las acciones de las empresas productoras de lingotes de oro.
Los analistas consideran que la recuperación en el valor del oro es una prueba para los actores de la industria, la cual en 2010 pagó el precio de la sobreproducción de lingotes una vez que los precios del metal cayeron por debajo de los 1,045 dólares por onza.
Fuente: Sputnik