El presidente serbio, Aleksandar Vucic, ha dicho que los “terroristas” que alimentan la violencia en Belgrado serán arrestados y juzgados, después del cuarto día de protestas que vio más gases lacrimógenos y enfrentamientos con la policía antidisturbios.
“Estoy orgulloso de Serbia por soportar esto”, dijo Vucic el viernes desde París, donde se reunía con líderes franceses y alemanes para discutir las negociaciones con la provincia de Kosovo. Vucic denunció la violencia y el caos como “terrorismo puro”
Una masa de manifestantes, en su mayoría hombres y mujeres jóvenes, se reunieron nuevamente frente al parlamento serbio el Viernes, cantando consignas contra Vucic, la primera ministra Ana Brnabic y todo el gobierno del Progressive Party.
Entre sus quejas se centraban los nuevos bloqueos sanitarios para detener la propagación de Covid-19 y el supuesto complot para reconocer a Kosovo, como las potencias occidentales han exigido durante más de una década.
Brnabic calificó las protestas de “comportamiento irresponsable” y dijo que Serbia registró 386 nuevos casos de Covid-19 el viernes, junto con 18 muertes.
Después de un largo enfrentamiento, una falange de la policía disparó gases lacrimógenos y se movilizó para dispsersar a los manifestantes.
Los manifestantes huyeron por King Alexander Boulevard hacia la St. Mark’s Church, y algunos fueron arrestados en el camino.
Mientras se reunían fuera de la iglesia y cantaban “¡Serbia!”la policía disparó gas lacrimógeno de nuevo.
La gendarmería en Humvees especialmente modificados se unió a la policía antidisturbios totalmente blindada. No había señales de oficiales montados que se habían utilizado a principios de semana para contener a los manifestantes.
Los enfrentamientos estallaron por primera vez el Martes, después de que Vucic partiera hacia Francia y un día después de que el gobierno anunciara que volvería a imponer un bloqueo sanitario para contener la pandemia Covid-19 – una medida que más tarde abandonó debido a la reacción pública.
Injerencia de NGOs extranjeras
El jueves vio un cambio de tono mientras simpatizantes de NGOs pro-occidentales organizaban sentadas y gritaban a cualquiera que llevara una bandera serbia o cantara consignas nacionalistas. Los nacionalistas han rechazado repetidamente los intentos de políticos y activistas de NGOs de controlar las protestas, en múltiples ocasiones persiguiendo a los funcionarios de la oposición que intentaron infiltrarse.
Vucic ha especulado sobre “todo tipo de influencia de los servicios de seguridad extranjeros” detrás de las protestas. El viernes, dijo a los periodistas sobre un incidente con activistas de “extrema derecha y extrema izquierda” que se atacaban entre sí con cuchillos, antes de pedir ayuda a la policía.
“No llevaban cuchillos con la intención de intercambiar tarjetas de la Copa del Mundo, ¿verdad?Él bromeó.
Fuente: RT
