El director ruso Nikita Mikhalkov afirma que el multimillonario Bill Gates podría estar tratando de implantar microchips a la humanidad bajo la apariencia de una vacunación, tratando de controlar a las personas y, en última instancia, “resolver” el problema de la sobrepoblación.
La crisis del coronavirus en curso ha producido una serie de teorías de conspiración salvajes, ya que algunos están tratando de encontrar las razones “secretas” detrás de la pandemia. Un puñado de ellas giran en torno al co-fundador de Microsoft Bill Gates y sus esfuerzos para desarrollar una vacuna contra Covid-19.
Una patente de Microsoft que recientemente recibió reconocimiento internacional ha sido encontrada por muchos “buscadores de la verdad” para ser particularmente alarmante. La patente WO/2020/060606 describe un “Cryptocurrency system using body activity data” – básicamente, un dispositivo que se puede usar para “minar” algunas monedas digitales usando el cuerpo de un ser humano. O, más bien, “otorgar criptomoneda al usuario cuyos datos de actividad corporal están verificados”, como dice abstractamente la patente.
La patente no escapó la atención de Nikita Mikhalkov, reconocido director de cine ganador de un Oscar, que impulsó toda una teoría en un nuevo episodio de “Besogon TV” (traducido aproximadamente como “desterrador de demonios (demon banisher)”, apodado “¿En que bolsillo está el estado?. El episodio fue transmitido por el canal de televisión Rossiya 24 el viernes, pero luego fue retirado silenciosamente de su horario y no se repite – algo que Mikhalkov ha tomado como un acto de “censura.”
Mikhalkov afirma que el nombre mismo de la patente tiene un significado oculto, acusando a Gates de intentar implantar microchips a humanos para controlarlos, ligandolo a su potencial programa de vacunación.
“La parte 060606 es algo alarmante. Usted probablemente entiende eso, ¿verdad? ¿Es esto una coincidencia o una selección intencional de tal símbolo, que en el Apocalipsis de Juan en la Santa Biblia se llama el “número de la bestia” – el 666?”.
Mikhalkov entonces va en una diatriba sobre un futuro distópico donde la sociedad digitalizada (e implantada con microchips) se divide en dos partes desiguales, a saber, la élite y los drones humanos que la élite controla. En busca de los “co-conspiradores” globales de Gates, Mikhalkov señala directamente a Herman Gref, el jefe del banco estatal de Rusia Sberbank, un conocido defensor de la digitalización de la sociedad. Sin embargo, la teoría del director no llega a explicar cómo ese sistema resolvería el problema de la superpoblación – o por qué Rusia estaría dispuesta a seguir el ejemplo del magnate empresarial estadounidense, si es el caso.
Covid-19: ‘Están preparando a la gente para implantes de microchips’ – Marat Safin
Al igual que cualquier otra teoría escandalosa vendida por una celebridad, el nuevo episodio de ‘Besogon TV’ se volvió viral en línea, obteniendo alrededor de 700,000 visitas en menos de un día.
Las conclusiones de Mikhalkov podrían ser bastante descabelladas, y la patente WO/2020/060606 no estar directamente relacionada con Gates, quien técnicamente renunció a la junta directiva de Microsoft para centrarse en dirigir la Fundación Bill & Melinda Gates de el y su esposa. La patente tampoco menciona microchipping, sino que describe “sensores” junto con un “dispositivo” para registrar la actividad corporal. Un supuesto propósito de dicha tecnología descrita es fomentar un estilo de vida saludable con los usuarios siendo “premiados” con criptomonedas por hacer ejercicio (salario por trabajo fisico?).
¿Debería eso ser un super asesino entonces? Dificilmente, ya que algunos todavía estarían asustados por las potenciales aplicaciones Black Mirror de esta tecnología, mientras que la discusión sobre la invasión de la tecnología (y varias formas de controles) en nuestra vida cotidiana nunca ha sido más relevante. Y aquellos que temen ser implantados con microchip por la fuerza por una corporación malvada, probablemente primero deberían buscar en sus propios bolsillos un pequeño “dispositivo de rastreo” llamado teléfono inteligente, que han comprado y llevado con ellos voluntariamente.
Fuente: RT
